Hoy vamos a entrevistar a un saxofonista de Hernani con una amplísima experiencia docente, un músico polivalente con una visión muy acertada en mi opinión sobre la pedagogía en los conservatorios de enseñanzas profesionales.
Hoy, SaxRules.com Roberto Pacheco.
SaxRules: Háblanos de tus inicios en la música.
Roberto: La primera experiencia musical que recuerdo fue en la ikastola. Se formó un coro en el que participaban mayoritariamente alumnos de cursos superiores, ensayaban en el recreo. Un día estuve un poco escuchando detrás de la puerta y decidí tocarla. “¿Los de primero podemos participar en el coro?” Ese día ya no salí a jugar al futbol.
Justo por entonces se puso en marcha en mi pueblo, Hernani, la escuela municipal de música. Al año siguiente me matriculé. Había que hacer dos años de solfeo previos a iniciarse con el instrumento. Uno de los días que fui a clase escuché al profe de saxo tocando sobre un disco. Era un tema de Michael Brecker con el grupo Steps Ahead “Self Portrait” y recuerdo perfectamente que en ese momento decidí que yo quería tocar el saxo. Ese profe era Erramun Oiartzabal. Tras el primer curso se marchó a estudiar jazz a Barcelona y continué los estudios con Cipri Otxandorena. Cipri tenía un perfil muy distinto como saxofonista. Por aquel entonces acudía a los seminarios que impartía mensualmente Manuel Miján en Rentería y nos acercó a ese otro saxofón. Recuerdo que incluso trajo a dar un concierto a Hernani al cuarteto de saxofones Orpheus que lideraba Manuel.
En estos inicios fue muy importante para mi la banda de mi pueblo. Su director en aquella época era Manolo Sagarna, saxofonista también, una persona a la que quiero y aprecio muchísimo. Ensayábamos los viernes de 20:00 a 22:00 pero el post ensayo a menudo se alargaba mucho…
Como profe siempre tengo muy presente esa cantidad de pequeños recuerdos que yo tengo en mi mente desde entonces y lo importante que puede ser cada pequeño detalle en la mente de un niño/a; el grupo y las vivencias que se crean en torno a la música son primordiales.
SaxRules: Haz balance de tus estudios profesionales y de Superior con José Silguero.
Roberto: Al terminar el elemental en Hernani marché para Rentería a estudiar con Josetxo Silguero, pero él estaba en excedencia estudiando con Jean Marie Londeix en Burdeos. Estuve dos años con el saxofonista valenciano Gabriel Sancho con el que aprendí y disfruté mucho. A la vuelta de Josetxo de Burdeos continué con él. Solíamos subir a Burdeos a escuchar las masterclases temáticas que hacía el Maestro Londeix mensualmente al alumnado del aula sobre las obras más importantes de nuestro repertorio: Creston, Schmitt, Milhaud…. Era un privilegio ver y escuchar aquello, todos/as tocaban tan bien.
Comenzó también a venir Marie Bernardette Charrier a Renteria una vez al mes y dábamos clase con ella. Cuando este curso concluyó comenzamos a subir nosotros a Burdeos a su casa. Fue una gran influencia para mi en aquella época, es una gran Maestra.
Josetxo Silguero es un gran profesional y en torno a él en Renteria nos juntamos en aquella época muchos de los profesionales que nos dedicamos hoy al instrumento en Euskadi.
Todos los veranos hacía algún curso con profesores como la propia Marie Bernardette Charrier, Andrés Gomis, Manuel Miján, Jose Antonio Santos, Arno Bornkamp…
La verdad es que de mi paso por el viejo Conservatorio Superior de San Sebastián no guardo muy buen recuerdo, se acercaba ya el cambio de plan de estudios. Yo ya estaba trabajando a jornada completa como profe de saxofón (antes podíamos dar clases con el Grado Medio, actual Profesional). Séptimo curso lo hice por libre y octavo pude hacerlo con Josetxo ya que la profesora titular estaba de excedencia.
SaxRules: ¿Cómo surgen tu relación con el jazz y tu gusto por la dirección?
Roberto: Mi relación con el jazz surge desde el primer momento. Fue Michael Brecker, su sonido, su música lo que me cautivó y me hizo decidirme por el saxo. Durante los años de profesional, superior y durante los primeros años como profesor (preparándome para la oposición) siempre estuvo presente el jazz pero en un segundo plano. Estudiaba saxofón clásico pero compraba y escuchaba discos de jazz. Empecé a dedicarle más tiempo y a estudiarlo más seriamente una vez de obtener por oposición la plaza de funcionario en la Escuela Municipal de Música de Hernani.
He asistido a muchos cursos, muchas horas de trabajo autodidacta…El inicio de los estudios superiores me pilló un poco tarde. En su momento no me animé a hacer el superior de jazz de lo cual ahora me arrepiento.
Con unos amigos formamos una banda de dixieland, Mac Jeara´s, con la durante unos cuantos años tocamos mucho por todo el norte de España y participamos en los festivales de jazz más importantes. Luego tuve la suerte de formar parte de la Pirineos Jazz Orquesta como saxofón barítono junto a grandes saxofonistas a los que admiro como Jon Robles, Victor de Diego, Gorka Benitez y Mikel Andueza.
A la dirección llegué por el propio trabajo como profesor de saxofón. Uno de los cuartetos de saxos de alumnos fue creciendo hasta convertirse en un ensemble de saxofones llamado Hernasax * que llegó a estar formado por 18 saxofonistas. Luego formamos una banda en la escuela que también dirigía yo. Empezaron a llamarme para proyectos…Lo mío en la dirección es más el trabajo de preparación que la batuta. Es un trabajo al que cada vez le he ido cogiendo más respeto. Durante 5 años he dirigido la Banda Municipal de Hernani (**). En este trabajo he aprendido mucho, no solo de música: la gestión de un grupo humano con más de 40 miembros, tan heterogéneo en niveles e intereses, la programación de la temporada…
SaxRules: En la actualidad diriges la Joven Orquesta de Jazz de Euskadi. Háblanos de esta interesante experiencia.
Roberto: En Euskadi existe desde hace bastantes años la EGO, algo así como la JONDE de Euskadi, con la que he colaborado como profesor de la sección de viento madera. Hace unos trece años se puso en marcha un segundo proyecto desde los tres Conservatorios Profesionales dependientes del Gobierno Vasco que se llama EIO, Euskadiko Ikasleen Orkestra, traducido es algo así como la Orquesta de Estudiantes de Música de Euskadi, que se forma por una selección de alumnos/as de los Conservatorios Profesionales y escuelas de música de hasta 18 años. Hace 5 años pusimos en marcha la EIJO que es lo mismo pero de música moderna.
En Euskadi llevamos varios años tratando de integrar la música moderna en los Conservatorios. La EIJO digamos que es el estandarte/punta de lanza de este proceso/proyecto. En el estado hay maravillosos proyectos de jóvenes orquestas de música moderna, como la Sant Andreu Jazz Band que dirige Joan Chamorro y es un referente a nivel mundial, pero casi todos los casos son de iniciativa privada. En el caso de la EIJO es un proyecto del Departamento de Educación del Gobierno Vasco que llevamos a cabo profesores de los Conservatorios Profesionales.
Creo que ya va llegando la hora que desde las instituciones se apoye también la música moderna y se vayan creando orquestas públicas de música moderna como por ejemplo la Big Band de la BBC en Inglaterra, la WDR en Alemania…
SaxRules: Haz balance de tu trabajo en el Conservatorio Profesional de Bilbao.
Roberto: A Bilbao he llegado este curso, es un poco pronto para hacer balances. Hay una maravillosa infraestructura, un Equipo Directivo muy preparado y que está haciendo las cosas muy bien…se dan todos los ingredientes para poder hacer un buen trabajo pero hace falta tiempo.
Anteriormente he estado diez años en el Conservatorio Profesional Francisco Escudero de Donostia-San Sebastián. En esos diez años formamos la Big band del Conservatorio y tuve la suerte de trabajar con maravillosos alumnos de saxo hoy día profesionales e impartí también una asignatura optativa, Iniciación a la Improvisación, en la cual tuve también la suerte de trabajar con todos los demás instrumentos y conocer a alumnos/as brillantes que me aportaron una visión más global del centro, de las diferentes maneras de trabajar en cada instrumento. En esta asignatura tenía desde alumnas de violín hasta alumnos de guitarra eléctrica que ya ejercían como profesionales en grupos de rock, pop…fue una experiencia exigente y enriquecedora a la vez.
SaxRules: ¿Integras el jazz dentro de tus clases del conservatorio?
Roberto: Si, yo no creo en la excesiva especialización. El mercado de trabajo pide saxofonistas con una formación lo más completa posible. El saxofonista que toca en una banda municipal de música al cabo del año toca un buen número de obras de música moderna y de jazz. El profesor de una escuela de música recibe muchos alumnos/as interesados en estas músicas. Gran parte del repertorio orquestal de nuestro instrumento tiene una gran influencia del jazz.
Mi propuesta es un currículo común que incluye ambos mundos hasta cuarto curso. En quinto y sexto curso un programa amplio y flexible que permite preparar al alumnado que opte por prepararse para unos estudios superiores u otros. Creo que es muy enriquecedor para ambos perfiles de saxofonista. Tiene su dificultad pero no más que la que tiene la enseñanza bilingüe en los colegios o en nuestro caso en Euskadi trilingüe (Euskara, Castellano, Inglés).
No soy nada partidario de la figura de profesor/juez. Creo que tenemos que tratar de acompañar al alumnado en éste largo camino que son los estudios musicales y debemos tratar de que disfruten del trayecto. El primer y más importante objetivo en cada una de mis sesiones es que el alumno/a la termine marchándose a casa con ganas de estudiar, de volver a coger el saxo cuanto antes para superarse y mejorar. Si esto no se da, de poco servirán las correcciones y los conocimientos que transmitamos en la clase.
Otra cuestión que tengo siempre en mente es la de hacer que el alumno/a se sienta músico. Siempre ponemos nombre a las agrupaciones, les hacemos su logo, su cartel de concierto con su estética propia…Busco que mi clase de cámara o de conjunto no sea una asignatura sin más…
Trabajo siempre con una clara vocación de servicio público, de hacer que esa hora conmigo sea útil para ese alumno/a que puede que no termine siendo músico sino ingeniero o chofer de autobuses…pero que lo que aprendió le pueda influir para amar la música y le resulten enriquecedores sea cual sea su dedicación en el futuro.
SaxRules: Nombra a las 5 personas que más te han influido como músico/persona.
Roberto: Sin duda musicalmente mi mayor mentor ha sido Josetxo Silguero. Él hizo de mí un profesional del saxofón.

La otra persona más importante es sin duda mi mujer, Judith Montero. De ella aprendo a diario de todo y a todos los niveles, vivimos en un continuo debate pedagógico-musical. Creo que cuando la Banda de Bilbao ganó una gran saxofonista tenor los Conservatorios perdieron a una de las mejores Maestras de saxofón, pues es una persona con gran vocación por la enseñanza.
Como referentes saxofonísticos nombraría a Branford Marsalis y a un saxofonista no tan conocido, Dan Higgins. Cuando vi la película “Catch Me if You Can” y escuché ese saxofón pensé que eso era lo que yo llevaba años buscando. John Williams pensó en él cuando escribió esta música teniendo a su disposición a todos los saxofonistas del mundo por algo. Él graba también por ejemplo los saxos que escuchamos en Los Simpson. Éste perfil de “músico de estudio” me encanta.
Anteriormente he nombrado a muchas personas muy importantes para mí pero creo que de quien más he aprendido sin duda en mi carrera ha sido de mis alumnos/as y compañeros de trabajo, de la propia labor docente. Tengo 43 años, empecé a dar clases a jornada completa siendo muy joven, con 21. Soy el mayor de cuatro hermanos (músicos los cuatro) en una familia humilde y no pude permitirme ir al extranjero…mi Master han sido los 22 años que llevo trabajando. Como antes expuse, las necesidades de la función docente me han ido llevando a formarme como director, arreglista, editor de videos, diseñador de carteles de concierto, gestor…si nuestro trabajo solo consistiera en tocar el saxofón y ser profesor/ juez una vez por semana sería muy sencillo. Pero hacer mi trabajo con ilusión e intentar generarla a su vez en los alumnos es un trabajo que abarca muchas más facetas.
SaxRules: ¿Tu momento musical más dulce?
Roberto: Te nombraría varios. Es muy difícil quedarse con uno. Me encanta observar el comportamiento de los grandes músicos con los que he tenido la suerte de compartir escenario. Con ellos se producen esos momentos de magia por la que merece la pena todos los años y horas de duro trabajo y esfuerzo.
Tengo muy buen recuerdo de un concierto que hicimos con la Pirineos Jazz Orkestra con Chano Dominguez y su sexteto. Recuerdo haber aprendido mucho esos días. Ver como trabajaba “el Piraña” con su ordenador portátil. Él no lee partituras, algo muy chocante para una mente de Conservatorio, pero, ¡cómo caminaba todo cuando él arrancaba con el cajón! Estaba Marc Miralta a la batería pero por una cuestión personal tuvo que ausentarse un día de los ensayos. Me impresionó cómo “el Piraña” con su cajón condujo durante todo el día de ensayo la big band. Fue muy bonito también ver de cerca a Tomasito de Jerez, él no actúa en el escenario, muestra lo que es y esto llega al público. Cuando hay gente así sobre las tablas el concierto pasa a ser un espectáculo, una experiencia inigualable.
Éste año hicimos un programa con la Orquesta Sinfónica de Euskadi en el que dirigía el trombonista Christian Lindberg. De Lindberg me encantó la ilusión que sigue poniendo en el trabajo una persona con tanta experiencia. En el pasado Festival de Jazz de San Sebastián actúe con el cantante de jazz Gregory Porter: según aparece ves que ese hombre tiene algo que otros no tenemos (aparte de la voz… je,je)
SaxRules: Set-up de clásico y Set-up de jazz.
Roberto:
- Soprano: Selmer Serie III con una boquilla Selmer “D” para clásico y Otto Link de pasta 7* para jazz.
- Alto: Selmer Serie III con boquilla Concept para clásico y para jazz saxo Keilwerth 90R con boquilla Meyer 6.
- Tenor: Selmer serie II con boquilla Selmer C** para clásico y Selmer Reference 54 con boquillas Otto Link de pasta y de metal 7*.
- Barítono: Selmer serie II con boquilla Selmer E para clásico y Meyer 7* para jazz.
SaxRules: Próximos proyectos.
Roberto: En mente para un futuro no muy lejano la grabación de un disco y la publicación de un método de saxofón que incluya la música tradicional de Euskal Herria. Llevo tiempo tratando de llevar a la práctica en mis clases eso que queda tan bonito en las programaciones: aprendizaje significativo, enseñar de lo fácil a lo difícil pero también de lo conocido a lo desconocido, de lo cercano a lo lejano…y creo que necesitamos un método con canciones que cuando el niño estudie en casa sean reconocidas por su aita-ama…Me encanta lo audiovisual, trataremos de realizar un método distinto con mucho sonido e imagen/video.
Como intérprete estoy haciendo en concierto la música de Charlie Parker With Strings y aprovechando para profundizar en el lenguaje del saxofonista que cambió la historia del jazz.