SaxRules.com Juan Antonio Aldehuela

Hoy vamos a entrevistar a un fantástico saxofonista jiennense con una trayectoria musical muy interesante, cuyo destino le ha llevado a crear el Aula de Saxofón del Conservatorio Profesional de Música «Costa del Sol» de Fuengirola (Málaga). Un aula muy activa cuyo Maestro es un derroche de energía, ilusión, trabajo y buen hacer.

Hoy, SaxRules.com Juan Antonio Aldehuela.

SaxRules:¿Cómo apareció el saxofón en tu vida?

Juan: He nacido en La Carolina, un municipio de la provincia de Jaén situado en pleno corazón de Sierra Morena, donde la tradición musical a lo largo de todos estos años ha dado y sigue dando muy buenos músicos y profesionales que estudian o ejercen su labor en diferentes bandas, orquestas y/o conservatorios andaluces.

Todo ello sin ser, sorprendentemente por la cantidad de músicos que hay, una localidad que con el paso del tiempo no ha tenido el apoyo y respaldo suficiente por parte de las instituciones políticas que había en cada momento, para apostar por la cultura y especialmente la música e instaurar así una banda municipal como sí la hubo en su tiempo a principios del S.XX, formada por hombres de la clase obrera y que tenían el trabajo de músicos como un complemento a los sueldos que le pagaban en las minas y que se perdió con el paso del tiempo  o una escuela de música municipal donde el desarrollo y vía de formación musical hubiera sido mucho más extenso y variado. En este aspecto hay mucho trabajo aún por hacer…

Por suerte, sí que contamos con un Conservatorio Elemental de música desde el año 1989, donde por cierto aprovecho estas líneas para felicitar a Teresa Rodríguez y Ramón González ( últimos directores del centro ) por la labor encomiable que han realizado en el centro durante muchos años atrás llevando a cabo un muy buen funcionamiento y gestión del centro.

Dicho esto, y contestando a la pregunta, en mi familia nadie se dedicaba a la música y por lo tanto no había antecedentes ni referentes a seguir sus pasos. El saxofón apareció de repente en mi vida a la edad de 8 años como fruto de una bonita casualidad y decisión por parte de mis padres al inscribirme en el Conservatorio Elemental de música “Enrique Granados” de mi localidad para intentar hacer otra cosa diferente que no fuera estar todas las tardes jugando al fútbol con los amigos. No hay día que no agradezca a mis padres su enorme esfuerzo de haber pensado y apostado por la música para convertir una decisión en una profesión llena de pasión y respeto

Como he dicho anteriormente, el saxofón apareció por casualidad ya que el instrumento que había elegido para comenzar mis estudios fue la guitarra. Cosas del destino que las plazas de guitarra se agotaron y el segundo instrumento que elegí fue el Saxofón. En el conservatorio, por aquel entonces, era el único instrumento de viento que se impartía ya que el resto de especialidades eran piano, violín, violonchelo, guitarra y Saxofón. Fue un auténtico descubrimiento  como instrumento ya que no tenía conocimiento de la sonoridad o aspecto del mismo. A diferencia de hoy en día, donde gracias a las plataformas digitales y tecnológicas con las que contamos al alcance de un “click”, al igual que la importante labor de divulgación que se hace en los diferentes ámbitos y promoción de actividades ( como por ejemplo conciertos didácticos dirigidos a escolares por parte de conservatorios, escuelas de música, bandas y orquestas ) el alumnado comienza sus estudios, al menos en la mayoría de los casos, conociendo un poco más sobre el instrumento con el que comenzará su aventura musical, o al menos un poco más que yo cuando comencé.

SaxRules: Háblanos de tu formación inicial musical hasta finalizar grado medio.

Juan: Tengo muy gratos y bonitos recuerdos sobre mis inicios en la música. Como he comentado anteriormente, todo comienza a la edad de 8 años en el conservatorio elemental de mi pueblo donde transcurren los 4 primeros años de formación con Manuel Garín. Unos inicios un tanto peculiares y que recuerdo muy bien, como si fuera ayer mismo, ya que hasta tener mi primer saxofón pasan algunos meses en casa trabajando solamente con el método y una boquilla, caña y abrazadera, que era el material que mis padres me compraron para comenzar hasta ver cómo se desarrollaba el inicio ( podéis imaginar mis primeras sesiones de estudio como eran ). Hacer una inversión que suponía además un gran esfuerzo económico de su parte en un instrumento que posiblemente no me gustara al poco tiempo y con el consecuente temor a que abandonara, podría ser un riesgo sin ruta de vuelta .

De esta forma, mi único contacto con el instrumento era cuando el profesor me lo prestaba para dar clase y al menos ir avanzando algo en la materia. Efectivamente, el esfuerzo e interés mostrado por la música y el instrumento, tuvo su recompensa y pasados pocos meses tuve mi primer Saxofón, un Yamaha Yas-62 de segundamano ( el cual aún conservo como oro en paño preparado ya para la nueva generación en camino ).

Pasados los cuatro primeros años continué mi formación en el Conservatorio Profesional de música “ Ramón Garay” de Jaén bajo la tutela de Bernardo Zagalaz. Un maestro, compañero y amigo del que guardo muy bonitos recuerdos y un gran cariño por todo lo vivido durante mis 3 primeros años de formación en la etapa profesional. Una persona comprometida con la música, exigente en sus clases, trabajador nato y el cual me inculcó una filosofía de trabajo basada en el rigor, en el esfuerzo y constancia como base para llegar a conseguir cualquier propósito.

El traslado de Bernardo al Conservatorio Superior de Música “Rafael Orozco” supuso un cambio de profesor en 4º curso de Profesional y tuve la suerte de, al menos durante un curso académico, contar con los consejos y maestría de Alfonso Padilla. Gran pedagogo con infinitos recursos para abordar cuestiones técnicas y musicales.

Este curso marcaría para mí un punto de inflexión importante en el desarrollo de mi formación musical y tener la convicción y total seguridad que mi deseo sería de continuar hacia unas enseñanzas superiores y emprender una formación musical fuera de España. Todo ello fue motivado por varios acontecimientos importantes que ocurrieron:

El primero de ellos, tenía que ver con un joven saxofonista, natural de Huelma y estudiante aún en la clase de Claude Delangle en el conservatorio Nacional de Música y danza de París. Lo conocí cuando tenía 14 años en un concierto que ofreció en Jaén con Fumie Ito y además coincidiría con él meses después en un curso de perfeccionamiento que impartiría en Mancha Real ( Jaén). Fue a partir de ahí donde nacería un bonito vínculo y amistad entre nosotros. Se trata de una persona muy especial e importante para mí, que me ha acompañado y ayudado mucho, al margen de mis estudios en el conservatorio, durante toda mi formación y carrera con el saxofón y al que le agradezco enormemente todo lo que ha hecho de una forma desinteresada ofreciendo su esfuerzo, tiempo, consejos, conocimiento, confianza depositada en mí así como su amistad, hasta el punto de considerarlo uno más de la familia. Se trata de Fede Coca. Todo el mundo conoce de su valía y calidad humana como persona así como musicalmente. Para mí ha sido como un hermano en lo personal y musical. Simplemente desde estas líneas aprovecho para decirle GRACIAS por todo!

El siguiente acontecimiento importante durante este mismo año que cursaba 4º de Profesional, fue cuando por primera vez salía de casa para ir a realizar un curso de perfeccionamiento fuera de mi provincia y con grandes profesores y referencias internacionales. Se trataba de los encuentros de la academia FuturSax organizados por Antonio Felipe y Daniel Durán en Móstoles. Unos seminarios impartidos durante el curso académico, en varios encuentros a lo largo del año, que nos brindaban la oportunidad de trabajar con profesores invitados de la talla de Claude Delangle, Arno Bornkamp, Jean-Denis Michat, Vincent David, entre otros muchos más. Todo un lujo, por aquella época, asistir durante un fin de semana a estas clases y conciertos que se realizaban. Fue una experiencia muy enriquecedora llena de aprendizaje tanto en lo personal como en lo musical. De estos encuentros salieron grandes amistades y compañeros como Daniel Durán, Miguel Ángel Lorente, Pablo de Coupaud, David Rubio, entre otros.

Precisamente de esta bonita amistad, surgió otro acontecimiento importante y una maravillosa aventura en forma de viaje durante varios años hacia uno de los cursos de saxofón que marcaron una referencia del panorama internacional. Se trataba de la Universidad Europea del Saxofón en Gap ( Francia ). Una semana mágica de clases y conciertos con Claude Delangle, Arno Bornkamp, Vincent David, Fabrizio Mancuso, Jean-Denis Michat, etc. Un curso inolvidable con un equipo de españoles que lo pasamos muy bien, repleto de miles de anécdotas y con una aportación y enriquecimiento humano, cultural y musical muy grande. Sin duda este tipo de cursos, como dije anteriormente, marcarían un antes y un después en tener la total convicción y seguridad de querer finalizar los estudios y continuar mi formación posteriormente en Francia.

Retomando mi formación en el conservatorio profesional, el último curso ( ya que hice ampliación 5º y 6º ) lo realicé con Víctor Manuel Martín. Guardo siempre un gran cariño y recuerdo de él, ya que se volcó en mi enseñanza y preparación de las pruebas de acceso al superior desde el primer momento. Destacan siempre sus ganas, predisposición y su entusiasmo de trabajar en pro de una enseñanza musical de calidad. Una suerte cruzarte en mi camino, maestro!

SaxRules: Háblanos de tu paso por el Superior.

Juan: Finalizada la etapa profesional decido continuar con mis estudios en el Conservatorio Superior de Música “Rafael Orozco” de Córdoba bajo la tutela de Manuel Ureña. Un conservatorio con un enclave perfecto dentro de una maravillosa ciudad como es Córdoba, repleta de actividades musicales y una agenda cultural y de arte muy variada.

Manuel Ureña ha sido una persona que desde que conozco a la edad de 14 años colaborando con el Ensemble de Saxofones del Conservatorio Superior dirigido por él mismo, me ha brindado toda su generosidad, amistad, apoyo, conocimiento y me ha ayudado mucho en la búsqueda y trabajo de ir más allá del trasfondo musical de la partitura.

Recuerdo con mucho cariño las clases de saxofón, donde siempre había un ambiente de compañerismo excelente y una muy buena dinámica de trabajo. Clases individuales, repertorio con pianista acompañante, grupos de música de cámara trabajando con el departamento de composición, ensemble de saxofones, conciertos por diferentes conservatorios y localidades fuera de Córdoba, cursos de perfeccionamiento con profesores del más alto nivel, etc. Es un profesor que se involucra al máximo con toda la clase y alumnado e incansable en su trabajo. Mi etapa en el conservatorio Superior finaliza en 3 años debido a la ampliación de curso en el 2º ciclo de las enseñanzas superiores, todo ello motivado por proseguir con mis estudios de perfeccionamiento en Francia donde el límite de edad para acceder a los diferentes conservatorios, especialmente en Lyon y París, estaba en 24 años.

SaxRules: ¿Cómo surgió el hecho de ir a estudiar a Lyon? Haz balance de esta etapa.

Juan: Todo comienza como comenté anteriormente más arriba, a partir del momento en el que salgo de esa burbuja que muchas veces, en la mayoría de estudiantes, nos creamos a partir del momento en el que dedicamos nuestro tiempo solo y exclusivamente a estudiar en casa para preparar semanalmente una clase con nuestro profesor y limitar nuestra formación únicamente a eso ( estudiar en casa, ir a clase al conservatorio con nuestro profesor y vuelta a casa a preparar la siguiente clase para tratar de mejorar y seguir avanzando en el programa de estudios). Todo ello no digo que esté mal, en muchos de los casos hoy en día es y sigue siendo así, pero pienso que como formación en el alumnado no es del todo de lo más completa posible. Salir de esa dinámica nos va a beneficiar y nutrir encarecidamente en el plano humano y musical para obtener una formación mucho más extensa y completa.

Desde estas líneas aprovecho para animar a todo el alumnado, que realmente le guste la música y el saxofón, a que salga de su aula y de su centro para realizar cursos de perfeccionamiento con todo el profesorado posible, asista a concursos, conciertos, colabore con bandas y/o orquestas, escuche música de calidad y lea sobre música.

Fue así como conocí a Jean Denis Michat en el curso organizado por la academia Futursax y posteriormente en la Universidad Europea del Saxofón en Gap. Recuerdo que en sus clases quedabas atrapado por su forma de enseñar, la energía que transmitía, su sonido redondo, amplio y lleno de colores, su actitud en clase y su forma de detectar y saber en cada momento qué era lo necesario para sacar de ti lo mejor en beneficio de la música. Desde aquel momento tenía claro que el objetivo era finalizar los estudios en España para acceder y continuar mi formación al CRR de Lyon con Jean Denis, a pesar de ser unos estudios no homologados en España y no servirían para nada una vez regresara, pero que a nivel de aprendizaje, experiencia, vivencia, conocimiento y formación tanto personal como en lo musical sabía que no había titulación que alcanzara eso y por todo ello merecería mucho la pena vivirlo y hacerlo.

De este modo es como ingresé en el CRR de Lyon en el año 2008 donde recuerdo unas pruebas de acceso bastantes exigentes y con mucho nivel por parte de los candidatos que se presentaban. Solamente había 3 plazas para entrar. Es un conservatorio muy demandado por los estudiantes de saxofón tanto a nivel nacional e internacional y prueba de ello es de la diversidad cultural que está compuesta la clase y el número elevado de alumnos que han pasado por el aula de saxofón y que al mismo tiempo, son muchos los que han conseguido acceder al CNSMD de París.

Lyon ha sido una de las etapas más bonita durante 3 años dentro de mi formación musical. Una etapa repleta de horas de estudio, clases individuales, grupales con pianista acompañante, preparación de pruebas al CNSMD, concursos, el ensemble ( l’artisanat furieux ) y los conciertos ofrecidos en diferentes lugares especiales como la ópera de Lyon, etc. Desde que llegué a esa ciudad tan bonita y llena de luz la vida te cambia y da un giro radical, para bien. Aprender un nuevo idioma no es fácil, pero si tienes la suerte de conocer excelentes amigos y compañeros como Vincent Haissaguerre, Robin Billet, Marion Jacquemet, Sandy Gregoris, Pierre Retien, Elise Perthuise, Roseline Pertuizet, entre otros, todo es mucho más fácil y al final de la etapa traes en tu mochila de aventura no solamente bonitos recuerdos y experiencias vividas en ese lugar, sino también bonitas amistades y un nuevo idioma.

Trabajar con Jean Denis Michat en el aula B-18 ha sido un privilegio, una sala llena de buena energía, mágica y con una vista panorámica de la ciudad, viendo al fondo “ Le mont Blanc” es todo un lujo. Una maravilla para los sentidos!. Recuerdo con mucho cariño todas y cada una de sus clases donde siempre consigue sacar lo mejor del alumnado trabajando con una energía increíble y consiguiendo que cada uno encontremos nuestro propio camino musical. El trabajo interior que se llega hacer es tremendo. Aún extraño mucho ese ambiente y energía que circula en su aula. Para mí ha sido siempre una gran referencia, una persona muy especial y admirada en mi vida con la que aprendí mucho en los años pasados y que aún sigo aprendiendo. Lo considero mi maestro, compañero y un buen amigo! Infinitas gracias por todo, sensei!!

SaxRules: Durante 4 años fuiste profesor de saxofón en la Banda Municipal de Jaén. Háblanos de tu experiencia allí.

Juan: Llegar a la Banda Municipal de música de la ciudad de Jaén en el año 2010, en mi tierra, fue uno de mis sueños hecho realidad. Especialmente para alguien que había estado relacionado con la tradición y el mundo de las bandas desde bien joven. Recuerdo estar en Lyon cursando mi último año de estudios cuando se convocaron oposiciones para acceder a la banda. Aprobar mis primeras oposiciones y formar parte de este maravilloso grupo humano y musical fue besar la gloria. Me sentía una persona muy feliz y agradecida por esta oportunidad que la vida te pone en el camino. La verdad, no hay palabras que puedan describir aquella emoción sentida.

Aprobar una oposición y poder desempeñar una labor como músico profesional siendo a la vez mi primer trabajo como músico, significó mucho en todos los aspectos personales y emocionales.

Compañeros de Juan Antonio en la Banda Municipal de Jaén.

Recuerdo esta etapa como un pilar importante en mi vida y formación musical. Guardo siempre un gran cariño y admiración por todos y cada uno de los compañeros e integrantes de la banda, especialmente mis compañeros de cuerda Rafael Ortega, Bartolomé Conchillo, Andrés Garrido, Antonio Esquinas o Gregorio Fernández. Me acogieron como uno más de la familia y me sentí totalmente integrado en el grupo desde el inicio

En el aspecto musical la labor desempeñada en la banda municipal trataba de realizar ensayos semanales para la preparación de conciertos de temporada ofrecidos en el teatro o parques de la ciudad, además de los conciertos realizados en los diferentes barrios y zonas, así como cualquier tipo de evento o festejo celebrado ( procesiones, inauguraciones de calles, actos institucionales, etc.).

La banda siempre estaba allí al servicio de la ciudad. Quizás, permíteme el comentario, “está en más sitios de los que debería y le pertenecen estar”. Se trata de una institución centenaria que, bajo mi opinión y forma de ver las cosas, debería ser más cuidada y respetada desde el punto de vista musical y profesional por parte de las instituciones políticas. Prueba de ello es la dejadez y desidia que ha tenido estos años atrás por parte de los diferentes equipos de gobierno del Ayuntamiento que han ido pasando. No se ha sacado oferta de empleo para convocar un concurso-oposición desde el año 2010 y por tanto viéndose el colectivo mermado en efectivos y en una situación de abandono total por las bajas que se han ido produciendo a lo largo de estos años atrás, ni más ni menos que 7 plazas. El colectivo llega hasta el punto de no disponer de una plantilla amplia y completa en las diferentes secciones que la componen y al mismo tiempo presenta ciertas dificultades para afrontar un repertorio donde suenen todas las voces ya que hay falta de componentes en algunas secciones que hace que no suenen, especialmente en los saxofones que cuenta actualmente con un saxofón alto y dos tenores.

Todo mi apoyo y mis mejores deseos para los compañeros/as de la banda por el enorme esfuerzo que hacen día tras día por sacar adelante su trabajo con mucha calidad y profesionalidad a pesar de las dificultades y condiciones en las que se encuentran. Esperemos que esta situación cambie pronto y desde la administración competente proteja y apueste por el arte y la cultura cuidando una institución y seña de identidad en la ciudad de Jaén como es su banda municipal de música.

Dicho esto, la estancia en la banda durante los cuatro años que pasé allí pertenecen a una etapa que me aportó muchas cosas positivas en todos los aspectos de mi vida y me ayudaron enormemente a crecer como persona y músico. Afortunado y agradecido eternamente de la acogida que tuve en este maravilloso colectivo repleto de calidad humana y musical.

SaxRules: Eres profesor por oposición del aula de saxofón del Conservatorio Profesional de Fuengirola (Málaga). Haz balance de tu trabajo hasta ahora y cómo llevas trabajar en el paraíso.

Juan: Llegar al Conservatorio Profesional de música “Costa del Sol” de Fuengirola no ha sido un camino fácil. “ Todo lo que vale, cuesta” y como todo en esta vida tiene un precio a pagar, que en nuestro caso se traslada a mucho sacrificio, constancia y un esfuerzo muy grande que a veces sale bien y se ve recompensado, y otras muchas, a pesar de todo, no vemos recompensa alguna. No queda otra que seguir trabajando duro para encontrarla algún día y que a buen seguro llegará de una u otra forma siempre y cuando haya trabajo, constancia y disciplina.

Terminada la etapa en la Banda Municipal de música de Jaén supuso para mí pasar por un periodo duro de bastantes años sin trabajo y no saber muy bien qué hacer con la música. Fueron años duros donde no dejaba de trabajar mi saxofón y estar preparado por si se presentaba alguna oportunidad laboral ( pruebas de banda, orquesta, oposiciones al conservatorio, etc.) y tener al menos algunas opciones de conseguir un puesto de trabajo relacionado con nuestra profesión.

Todo ello lo compaginaba al mismo tiempo con escuelas de música, clases particulares y otro tipo de trabajos sin relación alguna con la música. Supuso un período de reflexión y reestructuración muy importante en mi vida tanto a nivel personal como profesional.

Unas oposiciones requieren, como todos sabemos, tanto a nivel personal como profesional, un sacrificio muy grande en todos los aspectos de nuestra vida que a veces no es fácil conciliarlo y/o compaginarlo con el trabajo y la familia. Requieren de una dedicación plena de muchas horas de vida invertidas a lo largo de muchos años en una preparación que puede darte o no, en el mejor de los casos una oportunidad única de poder acceder y realizar lo que a uno más le apasiona hacer, como es mi caso, la docencia.

Un sistema de concurso-oposición en el cual no solo cuenta estar muy bien preparado a nivel interpretativo y pedagógico, sino que además es importante que te acompañe la suerte en el camino. Bajo mi punto de vista, se trata de un sistema que carece de bastante sentido en muchos aspectos y momentos del proceso  ( como desarrollar por escrito un tema que es muy subjetivo y el contenido del mismo está sujeto al concepto, idea, pensamiento o una valoración personal del tribunal sin haber nada previamente establecido, o por ejemplo exponer una unidad didáctica sin instrumento o material alguno, entre otros. ) y por supuesto mejorable en muchos ámbitos, donde la parte interpretativa, se debería tener más en cuenta y ser mejor valorada en el baremo, y una parte pedagógica que no demuestra la capacitación real del docente para dar clase. En definitiva un sistema con muchas lagunas, bastante obsoleto e injusto que debería de revisarse para cambiar muchos de estos aspectos.

Dicho lo cual, aprobar unas oposiciones como las del cuerpo de profesores de música y artes escénicas en Andalucía fue cuanto menos un verdadero sueño hecho realidad. Fueron algunos intentos sin suerte en convocatorias anteriores, incluso sin tener opción a entrar en bolsa, pero en la última convocatoria de 2017 aprobé con plaza, todo un cúmulo de emociones indescriptibles.   

Mi primera experiencia docente en un conservatorio, fue en Úbeda, en mi tierra, cerca de casa, la familia al lado y un conservatorio del que guardo muy gratos y bonitos recuerdos tanto de los grandes compañeros con los que coincidí ese mismo año como del alumnado. ¡Qué más se podía pedir! Fue todo muy gratificante.    

El siguiente curso el destino me tenía preparado un regalo en forma de aventura cargada de retos e ilusión por comenzar desde cero un proyecto de vida ligado a un enclave idílico como es Fuengirola y el Conservatorio Profesional de Música “ Costa del Sol”. Un ambiente enriquecedor con compañeros extraordinarios y un conservatorio que lo único que no le hace justicia es su infraestructura, ya que impartimos clase en un instituto y no disponemos de unas instalaciones apropiadas a las enseñanzas que impartimos. Esperemos que esto cambie pronto y tanto la administración como los dirigentes políticos responsables de ello tomen nota de las numerosas reivindicaciones que se han llevado a cabo por parte del equipo directivo y el profesorado para solicitar un centro adecuado.

Alumnos del Aula de Saxofón del CPM «Costa del Sol». Fuengirola.

El balance hasta ahora es muy positivo y me siento muy agradecido al mismo tiempo que afortunado por desarrollar mi profesión en este centro. Somos un aula que cuenta actualmente con cerca de 60 alumnos de saxofón y 3 profesores. Es muy gratificante trabajar con un alumnado que en cada clase se entrega con pasión hacía el aprendizaje musical y del instrumento.

Sin duda es unas de las premisas y retos que me marqué a la llegada del aula, inculcar en el alumnado el amor y respeto hacia la música y el Saxofón. Del mismo modo la motivación y despertar su interés por la música junto con la constancia y disciplina en el trabajo, son los ingredientes básicos que no pueden faltar para que todo fluya en la buena dirección. Difícil todo de conseguir, pero soñamos despiertos por conseguirlo algún día . En clase siempre intento que haya buen ambiente y dinámica de trabajo, despertar la reflexión sobre lo que hace el alumnado donde cada persona es diferente en el ritmo y adaptación de aprendizaje y sobretodo es importante que cada uno encuentre su camino y evolución personal.

En el presente año cumplo mi cuarto curso y estoy muy contento con la evolución del aula y del buen equipo que hay junto a las familias del alumnado. La labor pedagógica es una vía de transmisión repleta de aprendizaje compartido. Todos los días que pasan en el aula es un aprendizaje continuo. Es muy importante sentir su apoyo y colaboración para sacar lo mejor de cada uno intentado que encuentren su propio camino.


SaxRules: Háblanos de tu experiencia en concursos

Juan: Mi experiencia en concursos han sido bastante positivas y gratificantes, por suerte. He sido galardonado en algunos concursos de carácter nacional e internacional y esto siempre es reconfortante, te anima y motiva mucho a seguir trabajando y mejorando en nuestra formación como músicos.  

Para mí los concursos han significado siempre una oportunidad única y una dosis de motivación para continuar preparándome y formándome al margen del programa de estudios en el conservatorio. El aprendizaje que se obtiene en el camino de preparación así como en el concurso en sí,  son vivencias positivas que te hacen crecer y madurar como músico. Conocer muchos saxofonistas de diversos puntos del mundo, aprender de cada uno de ellos en sus interpretaciones e intercambios de experiencias fuera del concurso, hacen de estos puntos de encuentro una experiencia muy positiva al margen del resultado. Es importante pensar que el principal rival a superar es a ti mismo. Siempre lo he tenido muy claro en este sentido y es así como he intentado preparar e ir a un concurso. 

Desde aquí animo a pequeños, medianos y grandes saxofonistas a que vivan la experiencia del concurso como parte del aprendizaje en su formación y se presenten a todos los que puedan con un objetivo claro de superación así mismo.


SaxRules: ¿Tu momento musical más dulce?

Juan: Es complicado decantarse por un momento musical en concreto después de toda una vida repleta de música. Cada prestación encima de un escenario como solista compartida con mis amigos de la banda “ Agrupación musical Santa Cecilia” de La Carolina, o cualquier otra agrupación en las que haya participado, ha significado para mí un momento dulce y eso es sinónimo de agradecimiento, de momentos únicos, increíbles experiencias vividas con grandes personas y profesionales que he ido conociendo en el transcurso de la vida y al mismo tiempo todos estos momentos han sumado y me han enriquecido como persona y músico.

Sin embargo, es cierto que puedo nombrar algún momento en concreto porque guardo, con especial cariño, recuerdos muy bonitos de la primera vez que colaboré con la Orquesta Sinfónica de Madrid en el Teatro Real junto a Fede Coca y Miguel Ángel Lorente en la ópera “Porgy and bess” de G.Gershwin. Fue toda una experiencia única y preciosa poder vivirla desde dentro de tan prestigiosa orquesta al lado de buenos amigos y profesionales. Disfruté muchísimo de cada momento vivido y es por ello que será un recuerdo que perdurará en la memoria para siempre.

SaxRules: Nombra a las 5 personas que más te han inspirado a nivel musical/personal.

Juan:

  • Mis padres : Un apoyo y pilar fundamental en mi vida. Sin ellos nada hubiera sido posible. Su amor y sacrificio, no solo económico, sino en todos los aspectos de la vida que han realizado para darme lo mejor en mi carrera en España y Francia es algo que no está pagado y de lo cual estaré eternamente agradecido por ello. Gracias por todo!
  • Principales profesores en mi formación :  Bernardo Zagalaz, Alfonso Padilla, Fede Coca, Victor Manuel Martín, Manuel Ureña. Todos y cada uno de ellos han influenciado de una u otra forma en mi vida y es por ello que son parte importante en mi formación.
  • Jean-Denis Michat : Para mí representa la persona que ha marcado un antes y un después en todo. Lo considero un referente como persona y músico. Es un maestro que sabe sacar lo mejor de cada uno en cada momento y ayudarle a encontrar su propio camino más allá de lo técnico y musical. Su energía, inspiración, musicalidad, sonoridad, tratamiento de las emociones, las reflexiones en clase, hacen de él una persona y músico especial.
  • Arno Bornkamp: He realizado numerosos cursos con él y he tenido la suerte de estudiar en su clase en Ámsterdan durante varios meses en un intercambio de alumnos realizado entre la clase de Jean Denis Michat y la de Arno. Es un maestro con una visión de la música magistral, una sonoridad, musicalidad y expresión que lo hacen especial y único. Sus fantásticas grabaciones son joyas que me han marcado y he escuchado sin parar.
  • Mi mujer : Es una suerte compartir la vida con alguien que, al margen de la música, te entiende, comprende, respeta y sobretodo sientes su apoyo en cada momento importante y fundamental de la vida. Para mí, sin duda, un pilar fundamental en el día a día.

SaxRules: Próximos proyectos.

Juan: El proyecto principal y más importante son mis clases en el aula de saxofón del CPM “Costa del Sol” de Fuengirola. Hemos iniciado el curso recientemente y son muchas las novedades y actividades que hay por programar a lo largo del curso. Además el curso pasado pusimos en marcha las redes sociales del aula, creando un blog, canal de youtube, página Facebook e Instagram (@auladesaxofoncpmfuengirola) que seguiremos trabajando sobre ello para poner en valor y dar visibilidad al trabajo realizado por el alumnado.

De igual modo, a medio plazo hay fechas aún por concretar y cerrar, según la situación sanitaria nos permita, para impartir algunos cursos de perfeccionamiento, concierto con piano para Santa Cecilia y poner en marcha un proyecto de recital a solo con obras del repertorio original y transcripción para saxofón alto y soprano que abarca estilos desde el barroco a la música de vanguardia. Esperemos poder cerrar fechas y dar más noticias pronto sobre este proyecto. 

SaxRules: Set-up.

Juan:

  • Saxofón Alto: Yanagisawa WO-32 . Boquilla Selmer Concept y Vandoren A-28. Cañas Vandoren tradicional 3,5 y d’addario 3+
  • Saxofón Soprano: Yanagisawa 9937. Boquilla Selmer Concept y Selmer S90-170. Cañas Vandoren tradicional 3,5-4. D’addario 3 ½
  • Saxofón Tenor : Selmer serie III. Boquilla Vandoren T-20. Cañas Vandoren 3½
  • Saxofón Barítono : Selmer serie II. Boquilla Vandoren BL3. Cañas Vandoren 4

SaxRules: Muchísimas gracias Juan Antonio.

Puedes seguir al Aula de Saxofón del CPM «Costa del sol» en sus cuentas de Instagram , Facebook y Youtube.

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